eseemeese

smschatmailcelularskypenextelbippertelefono.

reconstruir historias, armar nuevas a partir de fragmentos, volver a pasar por el corazón.

colecciono algunas historias, y al verlas ahi fuera, pareciera que nunca pasaron.

me gustaba mas cuando los registros quedaban en la piel.

extraño tu letra, los días de espera, que chupes el sobre para cerrarlo y las estampillas.

temporada de museos

balnearios

sentía que venía haciendo las cosas correctamente.

pero siempre puede pasar que lo correcto no sea suficiente. y que las cosas se decidan desde otras lógicas. y las aguas suban, impunes, autónomas.

contra cualquier lógica.

y te ahoguen, hasta que tus pulmones estallan, y vos convencido de tu corrección y el oxigeno que nunca llega y el corazón en mil pedazos, y las paredes por el aire, y los árboles pudriéndose en la sal, y todos los colores al blanco de la muerte y vos convencido que hiciste las cosas bien.

y hace rato el silencio se adueño de vos, y es hora de que te despiertes, y te subas a ese tren que te lleve a algún otro lugar porque este pueblo hace rato dejó de ser lo que vos aun crees que podría.

guaminí

hay lugares donde valdría la pena morir.

invasión

los manos decidieron quedarse a custodiar epecuén, mientras los gurbos y los cascarudos avanzaron sobre buenos aires.

mi tío

una buena dosis de tati para todos aquellos que siguen creyendo que el diseño salva.

zanja de alsina

era 1939.

eran las torretas de nuestra muralla china, en medio de la pampa de la conquista, para vigilar que a ningún indio se le ocurriera acercarse a la civilización.

sodoma

trip

subir las velos al tren, salir, ver que aalvar le pone cuero marrón a las manijas de la parte pública y negro a las privadas, la crepe des poetes, y volver.
el domingo mas lindo dura tres renglones.

tal vez...

el pasado

había perdido el rumbo.

y decidío volver al origen, allí de donde había salido.
a ese lugar que solo conocía por una vieja foto que cumplía cuarenta años custodiando aquel instante.

llegó por necesidad, por olfato, por instinto.

y allí parado cuando el sol ya se rendía,

todo cobró sentido.

el rumbo, en definitiva , nunca es una certeza,

pero se viaja mejor cuando el pasado te da la bienvenida.